miércoles, 5 de agosto de 2015

Canguro gigante extraviado en Haedo, involucrado en ruta de la efedrina (y séxtuple asesinato).





























Los habitantes de Haedo se enfrentaron en la última semana a una situación fuera de lo normal: Un canguro de la especie Macropus Giganteus, comúnmente conocido como Canguro gris gigante, deambulando por los alrededores. Lo que más preocupa a vecinos y biólogos, es el probable involucramiento del marsupial en un séxtuple asesinato conectado a la ruta de la efedrina.



"Es una situación rara" nos comenta Nicolás Bamba, zoólogo que ejerce en el barrio de Moreno, "Normalmente estos animales pertenecen a llanuras áridas cercanas a marismas intermareales y no portan una Ruger 9mm semiautomática con balas de punta hueca."

La aparición del canguro sucede en paralelo al séxtuple asesinato de la banda de funk paraguaya Q'Chara, conectada al triángulo de la efedrina: Hong Kong - Haedo - Portugal.


Los registros aduaneros certifican el ingreso de los músicos, vía Ezeiza, y un riguroso interrogatorio, captado en video, entre Larry Ayala (bajista y líder) y un agente portuario. Aquí la transcripción:

Agente: ¿Alguna substancia para declarar?

Larry: Efedrina.


Agente: ¿Cuanta?

Larry: Séis toneladas.


Agente: ¿No es mucho ?


Larry: Depende.


Los músicos son liberados tras prometer que no van a usar la efedrina para hacer droga. Esto sucede un martes por la mañana. Horas después ocurre el primer avistamiento del Canguro junto a Damián Akerman.

La aparición del ex 9 moronista cobijando al marsupial, descubre las tramas que conectan al fútbol con el tráfico de drogas y la prostitución; el comúnmente llamado Hexágono de la muerte compuesto por: Xuxa - Maccabi Tel aviv - Club deportivo Morón - Ortigoza - Enrique Sacco - Guitarrista de Hanson.

Es mundialmente reconocida la rivalidad entre El triángulo de la efedrina y El hexágono de la muerte. Lo que comúnmente se conoce como La guerra del Eneágono fatal.

Una escucha registrada por interpol asegura que la segunda de estas organizaciones habría enviado un sicario hacia Argentina, para acabar con el grupo Q'Chara. En la grabación oímos como se refieren, una y otra vez, al asesino por el apodo de "Orejas".

¿Es Orejas el canguro cobijado por la familia Akerman?

Los especialistas criminales aseguran que sí.

El miércoles siguiente a su llegada y a las 18:00 hs, el canguro es visto saliendo de Haedo en dirección a Liniers, donde se encuentra con el grupo Q'Chara. Ocho diás después aparecé el conjunto musical dentro de una zanja, en las afueras de Bragado, provincia de Buenos Aires. Cada músico tenía 7 tiros, contabilizando un total de 42.

Las investigaciones arrojan el siguiente cronograma del fatídico miércoles.

11:00 - El conjunto musical se despierta y desayuna en un local de comida Judía cerca de Almagro.

13:00 - Caminan por Talcahuano.

17:00 - Reciben un mensaje del contacto Orejas: "Juntémonos a hablar de la efedrina y a comer".

20:00 - El grupo es visto ingresando a un local de comida alemana en Liniers. Encuentro con Orejas.

21:00 - Con la excusa de llevarlos a ver Terminator Génesis, Orejas convence al grupo Q'Chara de viajar en su camioneta.

21:30 - Los llevan a la casa de Akerman, donde sus cuerpos son congelados.

23:00 - Orejas se da cuenta que olvidó dispararles.

24:00 - Descongelan los cuerpos.

24:30 - Larry Ayala se despierta y pregunta "¿Qué pasó?". Recibe 7 tiros en la cara.

1:00 - Los congelan de nuevo.

2:00 - Hacen llamadas en joda a Radio Uno con el celular de Larry, para despistar a los investigadores.

3:00 - Llevan los cuerpos en dirección a Bragado.

4:00 - Los cuerpos se descongelan. Se moja el tapizado de la camioneta.

8:00 - Un maratonista encuentra los cuerpos. "Pensé que eran los Power Rangers. Después me acordé que son cinco", declara.

El canguro no vuelve a ser visto en Haedo. Dos semanas después se lo ubica en una casa quinta Iraní, donde niega haber visitado la zona oeste de Buenos Aires y dispara con un rifle de aire comprimido a tres periodistas y dos heladeros.

La causa por el séxtuple crimen sigue abierta, y la lucha contra el narcotráfico se percibe cada vez más cuesta arriba. Afortunadamente el equilibrio ecológico en Haedo ha sido restablecido.   



jueves, 30 de julio de 2015

Cómo comportarse en una entrevista laboral. Guía para el entrevistado.

Has decidido encontrar empleo y encendiste tu ametralladora curricular. Ingeniero agrónomo, bachero, guardaespaldas, no se inventó aún la tarea que te haga decir: “No estoy calificado”.
Por supuesto, creías que nadie iba a responder. Sin embargo hace diez minutos sonó tu celular y ahora tienes una entrevista por delante. De pronto no te sientes tan versátil.

La meeting se acerca, comienzas a transpirar. Tus instintos son adecuados para una vida basada en chistes donde se riman nombres y no mucho más. Por suerte ha llegado a tus manos esta guía. Sigue sus simples consejos y todo irá de maravillas.

Ya estás en el sitio de la entrevista, el gerente que te invita a pasar tiene aspecto sofisticado, su lapicera vale más que tus aportes jubilatorios al día de la fecha.
No temas, veamos un posible diálogo de apertura y su correcta ejecución. Llamaremos G al gerente y U a usted.

G: Gracias por venir. Veo que vive lejos, ¿tuvo problemas para encontrar el lugar?

U: Para nada, suelo recorrer estas zonas, de hecho por tres años tuve un empleo en esta misma manzana.

G: Oh... ya veo, muy bien.

Aquí el gerente ha tratado de vislumbrar las posibles dificultades que tendría una persona, si debiera recorrer grandes distancias al trabajo.
No solo lo hemos tranquilizado acerca de este punto, también pudimos deslizar la mención a un empleo donde permanecimos largo rato.

Veamos una ejecución errónea de la misma escena.

G: Gracias por venir. Veo que vive lejos, ¿tuvo problemas para encontrar el lugar?

U: No, me quedé el martes en lo de un amigo que vive por acá.

G: Hoy es viernes.

U: ¿Posta?

Nunca conviene demostrar desorientación temporal, por más real y severa que sea. El hecho de tener amigos que lo aceptan a uno a dormir después de los treinta, tampoco vaticina nada bueno.

Observemos otro error posible.

G: ¿Gusta algo para tomar? ¿Tal vez un café?

U: El buen café es colombiano.

G: Entiendo...

U: Quiero decir, todo lo colombiano y bueno entra por la nariz primero.

Aquí el desatino lo notamos en la parte final del intercambio. Usted, en un afán cosmopolita, quiso dejar claro que es hombre de mundo. Pero la mención a cosas que entran por la nariz tan temprano en la entrevista (y en la mañana de un lunes) le ha jugado una mala pasada.
En general recomendamos una visible y clara línea de pensamiento. Las florituras de su vasta formación cultural pueden llegar a dar una impresión errónea de arrogancia.

G: Un buen currículum, como usted sabrá, no garantiza un triunfo en el campo laboral.

U: Y un Charizard recién evolucionado, como usted sabrá, no garantiza un triunfo en un torneo profesional. No al menos contra un mazo de agua.

G: Estaremos en contacto.

U: Guarda con la batería entonces.

G: Nos gustaría que abandone el edificio.

En este último caso, una solapada mención a sus conocimientos sobre las mejores opciones a la hora de armar un mazo competitivo en un torneo de cartas Pokemon, le ha jugado un revés inesperado. La remera de Juventud Antoniana que eligió ponerse tampoco ha inclinado la balanza en su favor.

¿Qué decir acerca del aspecto personal entonces? Sin dudas es tema para tener en cuenta. Una imagen elegante aunque levemente informal es siempre recomendable.
Usted ha elegido llevar guantes de arquero a la entrevista y tendrá que rendir cuentas por esto. Su explicación: “Bueno, no espera que me escupa las manos así sin nada, no?”, si bien articulada, es un tanto críptica y aún denotando una sana preocupación por la asepsia, genera más preguntas que respuestas.

Si elige zapatos recuerde llevar siempre dos.

A la hora de seleccionar sombrero desestime coronaciones tales como hélices, falsas garras de velocirráptor, linternas, soportes para bebidas enlatadas, publicidades de software en estado de desarrollo y afines.

Si se pregunta acerca de la puntualidad, déjeme asegurarle que no es tema menor. Arribar tres horas más tarde y decir que ya habías llegado pero no te vieron, es inaceptable. Evite también dar un aspecto de exagerada previsión. Dormir en la puerta del edificio será un paso en falso.
No solo la puntualidad juega un papel determinante. El modo de ingresar al despacho y saludar a nuestro interlocutor debe ser claramente planificado. Un apretón de manos firme pero no agresivo mientras se mantiene contacto visual; y recuerde: Espere a que la otra parte retire su mano, de otro modo puede proyectar una negativa sensación de inseguridad.
Esconderse tras una puerta para asustar a su entrevistador suele ser un mal comienzo. Echar sal rosada en marcos y ventanas, si bien tiene una sólida base esotérica, lo hará ponerse a responder preguntas antes de lo previsto.
Recuerde que la entrevista no acaba hasta que usted se retira. Aún sabiendo que hemos conseguido el empleo debemos mantener una postura natural. Gritar con un puño apretado hacia abajo “¡Vamos carajo!” le restará profesionalismo.   

Otro error común es precipitarse a hablar. Demuestre que sabe manejar los silencios.

G: (silencio)

U: Le aviso, no es que usted me aburra pero por ahí cabeceo. Soy medio narcoléptico.

Mal. Totalmente evitable también.

G: (silencio)

U: ¿Sabés que salió ayer a la noche en la nacional? Le jugué al setenta y ocho porque soñé con...

G: (silencio)

U: No importa.

Mal, y tampoco cae bien tutear. Hacer entender que parte de nuestra economía depende de lo que soñamos ayer, no suma.

G: (silencio)

U: Hace calor... igual no digo que haga calor acá eh, en la calle...

G: (silencio)

U: Está para bermudas hoy. Yo usaba siempre cuando era Hardcore, mis amigos también, en esos recitales había bocha de Skinhe...

G: (silencio)

U: No importa.

Sí importa, lo siento. Aprenda a mantenerse callado y prívese de cualquier comentario que lo ate a grupos de reputación neo-nazi. Se verá recompensado con sólo escuchar activamente. 

Es sabido que muchas empresas gustan de realizar pequeños exámenes grafológicos. Un pedido común es dibujarse a si mismo frente a una casa. Manténgase dentro de lo conspicuo. Evite representarse con partes robóticas. Si esto se le hace demasiado difícil, al menos intente que su personaje no se vea envuelto en luchas sangrientas que decidirán el orden galáctico.
Respecto a la casa. Barrotes en las ventanas nunca transmiten un mensaje positivo. Barrotes unidos por un cable a un grupo electrógeno, menos aún.
























Usted se siente inclinado a dibujar nubes, lo cual no tiene nada de malo, pero ahora siente que una nube no es tal cosa sin lluvia. A continuación sitúa en el cielo a un ser de túnica y barba que grita “¡Sentid la ira de las eras!”. Ha notado el error. El robot se oxidará por culpa de la lluvia y corre peligro de electrificarse con los barrotes. Su próximo paso es dibujar una celda de protones que contenga el ataque de Galactus y un paraguas para la representación futurista de su alter ego. Seguramente alguien de una imaginación tan excitable ha transpirado dando vida a tamaña ilustración, recuerde, cambiar de remera durante la entrevista no será bien visto.

Por último, a la hora de presentar referencias limítese a un par y que sean de confianza. Veamos ejemplos a evitar.

“Enrique. Sabe que trabajé en Sevel. Tel: 6-3758-2740 (de su mujer). Llamar viernes, sábado y domingo después de las siete”

“Nené Matos, creo que ya salió. Lo ayudé con documentos uruguayos. Tel: 55-3165-9127 (No llamar desde teléfono propio). Contactar de noche y preguntar por él luego de cinco minutos charlando trivialidades.”  

Siguiendo estas simples directrices, debería abandonar la entrevista luciendo un empleo nuevo. En el peor de los casos esta guía le permite abandonar el edificio sin escolta.


Le deseamos suerte, el éxito es para la gente que toma agua saborizada.